La relación entre República Dominicana y Venezuela ha tenido altibajos significativos, especialmente durante la presidencia de Hugo Chávez. Todo comenzó en 1998, cuando Chávez realizó su primera visita oficial al país, siendo recibido por el entonces presidente Leonel Fernández. Esta visita marcó un inicio en las interacciones entre ambos países, que se intensificaron con la llegada de Chávez en 2001, cuando participó en un juego de softball y grabó su programa “Aló presidente”, generando un ambiente de cordialidad.
Sin embargo, la situación se tornó tensa en 2002, tras un intento de golpe de Estado en Venezuela. En ese momento, se produjo una solicitud de extradición de supuestos conspiradores desde la República Dominicana, lo que desató una crisis diplomática. Las relaciones se deterioraron aún más debido a comentarios del expresidente Hipólito Mejía, quien insinuó un plan de asesinato contra Chávez, lo que llevó a Venezuela a suspender el suministro de petróleo al país y a retirar a sus embajadores.
Durante el mandato de Leonel Fernández, las relaciones mejoraron notablemente con la inclusión de República Dominicana en el programa Petrocaribe. No obstante, en 2008, se volvió a agravar la situación cuando Venezuela decidió retirar a sus embajadores tras la entrega no autorizada de ayuda humanitaria para damnificados en el país. La última visita de Chávez en 2010 fue significativa, ya que se concretó la compra del 49% de las acciones de la Refinería Dominicana de Petróleo por parte de PDVSA.
Con la llegada de Nicolás Maduro a la presidencia, la relación se volvió aún más compleja, especialmente tras la sentencia 168-13, que involucraba a República Dominicana en asuntos relacionados con Haití. Esta serie de eventos culminó en una ruptura definitiva de las relaciones diplomáticas tras las elecciones de 2018, marcando un capítulo final en la historia de la interacción entre ambos países.
