MITOS Y VERDAD DE LAS VACUNAS

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Santo Domingo- Son muchas las conjeturas que se han formado respecto a la inmunización contra el Covid-19 no sólo en República Dominicana sino en otros países.

La novedad y rapidez con la que se ha desarrollado el producto y el poco tiempo para ver desarrollada su efectividad o posibles reacciones adversas son algunos de los motivos que hacen dudar a los dominicanos de colocarse la vacuna recién llegada al país.

Añadido a esto el precario discurso tranquilizante por parte de organizaciones de salud certificadas, laboratorios y demás actores del sistema han provocado la duda en los seres humanos que preocupados admiten no sentirse seguros de las posibles reacciones no favorables en sus cuerpos luego de aplicada la vacuna.

Sin embargo, ¿qué hay de cierto en estas suposiciones? ¿Cuáles son los mitos o verdades detrás de la vacuna que promete fortalecer los anticuerpos para combatir la pandemia del siglo XXI?

¿Duele?

Como toda administración cutánea el líquido o la cánula (inyección) puede provocar dolor o picor. Dependerá de la persona muy específicamente. Varias son las personas que al colocarse la vacuna del Covid-19 experimentan solo el dolor muy leve de la inyección al penetrar la piel.

Otros, sin embargo, alegan sentir el líquido un poco más fuerte y perciben sensación de dolor leve, pasajero durante pocos segundos.

A juicio de los expertos y de las enfermeras que aplican la vacuna no duele para sentir angustia, es una inyección normal como cualquier otra sustancia y medicamento, alegan.

Efectividad

Especialistas en diferentes ramas de la medicina y diferentes centros médicos han levantado la voz durante toda esta semana alentando a la población a colocarse el medicamento.

Tal es el caso del titular del Colegio Médico Dominicano, Waldo Ariel Suero al contemplar la aplicación de la vacuna como “necesaria” e instó a los dominicanos a vacunarse pese a reconocer que ninguna vacuna posee una efectividad de más de 70%.

Asimismo, la experta en arritmias y electrofisiología del Hospital Metropolitano de Santiago, Carmen Encarnación explicó que “hay que vacunarse”, es lo más tranquilizante y prometedor que tenemos, “lo peor sería no hacerlo”, dijo.

Por lo que han sido más las críticas y sugerencias a favor encontradas en las redes sociales, medios tradicionales de comunicación, personalidades del sector salud, organismos internacionales, médicos y ciudadanos en sentido general afirman que lo correcto y prudente en este tiempo es vacunarse igual como se reciben las vacunas al sarampión, tétano, viruela, influenza, entre otras enfermedades.

Algunas teorías conspirativas

Perjudica la fertilidad, en particular en los jóvenes

No existen pruebas hasta el momento de que la vacunación provoque anticuerpos que ataquen a la placenta.

Aunque Pfizer, en su ensayo de la vacuna, intentó excluir a las mujeres embarazadas, en este participaron 23 mujeres en este estado, ya que es probable que quedaran embarazadas poco después de la vacunación.

Es 100% eficaz

Por desgracia, esto no es cierto. Solo las vacunas certificadas han demostrado que previenen la enfermedad sintomática, así como los desenlaces negativos, es decir, hospitalizaciones o la muerte. 

Aún se desconoce si el medicamento previene por lo que existe la posibilidad de que las personas vacunadas sigan infectándose.

Los efectos negativos de este antídoto son más graves que los de las vacunas para otras enfermedades

Según la OMS muy pocas personas a las que se les ha administrado la vacuna han experimentado anafilaxia, una reacción alérgica grave. Entre los síntomas más frecuentes están el malestar, los escalofríos, el dolor y la fiebre, pero, en general, esos síntomas no son preocupantes, alegan.

Agregan que estos síntomas son señales de que nuestro sistema inmunitario está funcionando.

Rapidez en la investigación

Gracias a la inmensa inversión pública y a un mercado mundial garantizado muchas empresas destinaron millonarios recursos para que científicos en todo el mundo se dedicaran a investigar y crear una vacuna contra el COVID-19.

Las mismas han sido certificadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por su sigla en inglés) de Estados Unidos, así como por la Organización Mundial de la Salud.

En ese sentido, existen más mitos que verdades respecto al  medicamento que promete con gran aval de eficacia, según insisten los profesionales de salud crear anticuerpos para combatir la enfermedad y proteger junto a la mascarilla y el distanciamiento mucho más a los seres humanos de la epidemia del coronavirus.

Como afirma la experta del Centro MCA que lidera Pedro Ureña, “tenemos una luz y debemos sentirnos optimistas y confiados’’, dice Claudia Almonte.

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