Generar conciencia ciudadana, es lo primero que hay que lograr en el país, para que juntos podamos resolver los problemas ambientales que aquejan a nuestra hermosa isla. Las autoridades y el gobierno, son tan responsables como el dominicano de a pie de la preservación de nuestros recursos, pero es el ciudadano común, quien en muchos casos, realiza actos que van en contra de su propia salud y vida.
La Contaminación de los ríos y mares es producto de los desechos de las industrias, de los hogares; de la inconciencia de las personas, quienes prefieren lanzar sus desechos a las riveras de los ríos, han convertido al sistema fluvial en un vertedero. A esto le agregamos, la construcción de viviendas cercanas a los ríos, las cuales, algunas lanzan sus aguas negras hacia los ríos y cañadas. Todos estos desechos sólidos, orgánicos y no orgánicos, en vez de ir a un basurero comunal para su posterior transferencia, terminan llegando a nuestras playas, contaminándola, no solo en su parte biológica, sino en la visual, afectando al turismo y los pobladores locales. Esto genera mayor inversión del gobierno para su recuperación y limpieza, cuando se podría utilizar en obras para beneficio de la comunidad.
El problema de la basura, es de alto nivel; la isla produce diariamente, 14 toneladas aproximadas de basura, esa basura genera más de 30 litros de líquidos contaminantes para nuestro ambiente y suelo, muchos de los vertederos están cercanos a zonas acuíferas. El país cuenta con más de 340 vertederos, sin embargo, esto no es suficiente si no hay políticas de clasificación de la basura, El Estado debe educar a sus ciudadanos, a que desde casa clasifiquen la basura y esta sea depositada en conteiner específicos, así el traslado y procesamiento de los desechos en los vertederos sería un trabajo más justo para nuestro ambiente, y al emplear el modelo del reciclaje, es un valor agregado para la sociedad, el Estado debe implementar formalmente políticas de clasificación y reciclaje para todo el país
El sistema de alcantarillado, o red de aguas servidas, no es un beneficio que llegue a todos los pobladores, en muchos casos, las viviendas se sirven de letrinas o pozos sépticos, construidos en algunos casos, de forma empírica, generando contaminación a los suelos.
Estos son solo algunos detalles, de otros problemas ambientales que tenemos en la isla, que se deben atacar pero con educación, con el ejemplo y con la disposición de políticas públicas direccionadas a buscarle una solución, que quede como un ejemplo del actuar diario de la ciudadanía.
Carmen Banca